Jose Ángel Ruiz
Es el puente más antiguo de los tres con que cuenta actualmente Talavera sobre el Río Tajo. Se cree que parte de él podría ser de origen romano, aunque queda muy poco de aquella época, debido a las frecuentes avenidas del río que lo derribaba parcialmente. La gran construcción se acomete hacia finales del siglo XV bajo la dirección de Fray Pedro de los Molinos
La historia de este puente se remonta al año 1870, aunque su construcción no comienza hasta principios del siglo, en 1904. Su inauguración cuatro años después significó todo un hito para la ciudad, que veía como mejoraban sus comunicaciones con la histórica comarca de la Jara, Extremadura y Andalucía. Este puente supuso la aplicación de los principios constructivos surgidos de la Revolución Industrial, cuenta con 426 metros de longitud, repartidos en 10 tramos de hierro y acero.
Las primeras referencias históricas sobre este puente aparecen en el siglo XV. Quedan en pie tres ojos del sector este del río. Las pilas están en su mayoría recrecidas por sucesivas restauraciones de distintas épocas, distinguiéndose sus partes de origen medieval, en mampostería o sillería y las obras de ladrillo, incluida la que se realiza en 1920, fecha de su última restauración.
Es el puente más alto de España, con un pilono de 192 metros, incluido su mirador. Su longitud de 740 metros más 318 del vano atirantado es la mayor a nivel nacional y la segunda de Europa, detrás del puente de Normandía. Además es el más ancho del país, con 36 metros, y el de mayor luz con pilono. Se abre al tráfico el 17 de octubre de 2011.
Utilizando el término que se aplica en el siglo XVI, a este "pontón" le faltan referencias documentales. El único elemento disponible para enmarcarlo cronológicamente es una labra heráldica que corresponde a el cardenal Juan Pardo Tavera, arzobispo toledano (1534-1545) y señor de la villa de Talavera, que se encuentra en el centro de su pretil y se extrae hace varias décadas. En la actualidad se conserva adosada al muro de los escudos de la basílica de Nuestra Señora del Prado.
Fue mandado construir en 1380 por el entonces Arzobispo de Toledo y Duque de Estrada, D. Pedro Tenorio. Las obras finalizaron en 1388. Se realiza en granito, contiene arcos de medio punto que van disminuyendo hacia los lados. El arco central mide aproximadamente 14,5 m desde la superficie del agua. De los dos arcos centrales arrancaban dos torres labradas en sillería granítica; ambas eran sólidas construcciones que defendían el Puente. La primera torre era cuadrángular de aspecto macizo, la segunda de planta rombo-hexagonal de perfil más esbelto aunque de menor elevación. Fueron derribadas a finales del S. XIX, por lo que según se afirmaba impedían el tránsito.
El hermano pequeño del puente Reina Sofía, construido a finales del siglo XIX, con una parte de y el vano central de hierro, formando una catenaria invertida unida superiormente por vigas. Aunque lo verdaderamente admirable son las vistas del rio y el castillo que desde él se pueden disfrutar.
Puente romano de un solo ojo formado por arco de medio punto con arranque sobre las rocas del cauce del Río Tiétar.
Se trata de un bonito puente sobre el río Pusa que data de 1852 y es de estilo neoclásico. Su curioso nombre se debe a que se sitúa en el paraje Malpasillo, donde el río discurre por una pequeña hoz rocosa, tan estrecha que podría pasarse de un solo salto, pero poniendo en riesgo la vida si se da un "mal paso".
Uno de los símbolos más identificativos de la Via verde de la Jara, el viaducto vuela sobre las aguas embalsadas del río Tajo. Tiene 365 m. de longitud y 60 m. de altura
De todos los puentes construidos sobre las gargantas de la comarca de la Vera, quizás sea el más impresionante.
Es parte de la calzada romana que une Plasencia con el Puerto del Pico y Ávila. Con un tamaño impresionante, de un solo ojo. Se puede discutir mucho sobre su origen romano, de hecho ha sufrido tantas reconstrucciones que hace más difícil pronunciarse con seguridad sobre su origen.
