El objetivo de este proyecto era, además de cumplir con la función propia de crear piezas de mobiliario para sentarse, intentar ser un medio de ayuda para estas personas en su proceso de recuperación: se buscó incrementar la auto confianza de los sin hogar mediante la experiencia artística y la participación en el “diseño” de los pisos que iban a convertirse en su vivienda. El proyecto recibió el primer premio de la convocatoria Diseño contra la pobreza y exclusión social del Ministerio de Cultura el año 2010.
Por lo que veis la distribución no era uno de los temas de este proyecto en el punto inicial, pero 7 años después el proyecto no dejan de trabajar por la repercusión que despertó una sinergia tan "extraña" como la del diseño+sin techo. A nivel personal creo que es un buen caso para reflexionar sobre la cultura libre.