Cómo dar un monólogo sin estar nervioso
Escriba una conclusión en la que recapitule lo que ha dicho.Realice un ejercicio de relajación antes de comenzar. Por ejemplo, respirar profundamente, tensar los puños y luego relajar las manos, etc.Practique su discurso una y otra vez, preferiblemente frente a un espejo.Lleve consigo las tarjetas o notas, aunque haya aprendido el monólogo a fondo.Dirija su discurso a los miembros individuales de la audiencia. Cambie su mirada de una a otra mientras habla.Prepare una serie de encabezados y escriba un párrafo corto para cada uno. Use tarjetas separadas o una hoja de papel.Escribe una introducción en la que expliques de qué vas a hablar.Investiga tu tema a fondo y averigua lo que te propones decir.
