"10 curiosidades sobre el Kraken"

La criatura podría medir 30 metros, pero con tentáculos podría llegar hasta 60 metros.

En 2016 un grupo de paleontólogos norteamericanos anunció el hallazgo de lo que parecía ser la guarida de un enorme monstruo marino de más de 30 metros de longitud, similar a un kraken en la Antártida. El investigador principal, Mark McMenamin, del Mount Holyoke College, en Massachussets, ha expuesto nuevas evidencias de la existencia de la criatura, incluyendo lo que puede ser la punta de su pico con forma de diente.

Muchos informes seudocientíficos dijeron que los krakens atacaban con sus fuertes brazos a los barcos pesqueros. Si les fallaba esta estrategia, las criaturas empezaban a nadar en círculos alrededor de la nave, creando un fuerte remolino para hundirla.

A pesar de su tamaño y velocidad, la especie del kraken tiene un predador: el cachalote. Las batallas entre esos animales suelen ser frecuentes, ya que es común encontrar cicatrices en la piel de las ballenas, dejadas por los brazos y tentáculos del calamar, los cuales tienen ventosas alineadas con afiladas estructuras quitinosas parecidas a dientes. Pero un kraken no tiene los suficientes músculos en sus tentáculos como para ceñir a su presa, y nunca puede superar a un cachalote en un “duelo”. Su única opción es el escape, cubriendo su salida con la usual nube de tinta cefalópoda.

Algunos marineros cuentan que, antes de comerse a sus presas, el kraken realizaba una especie de movimientos entornando sus tentáculos y emitiendo una especie de sonido. Al parecer, este sonido era una llamada a otras especies para mostrar que, el sujeto/los sujetos en cuestión, eran sus presas y que nadie debía acercarse a él mientras se las comía.

Kraken se refieren al término "krake", una palabra escandinava que designa un animal enfermizo, malsano o algo retorcido. Hace referencia a unos rasgos atípicos y lúgubres.

Sus guaridas se encuentran a varios miles de metros bajo el mar y son verdaderos complejos de cavernas en los que deposita los restos de cadáveres que no ha devorado, así puede conservarlos hasta que se vuelva a despertar su apetito. Sus presas tienden a no acercarse a estos lugares para no ser cazadas y devoradas de forma despiadada.

Ya hace un par de siglos que se llevan produciendo los avistamientos de krakens y los lugares más frecuentes han sido en las costas del Atlántico Norte y de Noruega. Un obispo noruego afirmó que en el año 1752, visualizó a un kraken y afirmó que el negro de las aguas del mar de Noruega era debido al mecanismo de defensa de esta criatura.

En las antiguas sagas nórdicas, nunca se mencionaba el nombre Kraken. Según algunos expertos, esto es debido a que su mención era atraer a la mala suerte e invocar al monstruo.

Algunas versiones cuentan que cuando un kraken dormía, parecía una isla y los marinos que desembarcaban, encontraban una terrible muerte acuática.