Designers&Junk Food

Datos y cifras sobre la obesidad

• Desde 1975, la obesidad se ha casi triplicado en todo el mundo.
• En 2016, más de 1900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos.
• En 2016, el 39% de las personas adultas de 18 o más años tenían sobrepeso, y el 13% eran obesas.
• La mayoría de la población mundial vive en países donde el sobrepeso y la obesidad se cobran más vidas de personas que la insuficiencia ponderal.
• En 2016, 41 millones de niños menores de cinco años tenían sobrepeso o eran obesos.
• En 2016 había más de 340 millones de niños y adolescentes (de 5 a 19 años) con sobrepeso u obesidad.
• La obesidad puede prevenirse.

Después de leer algunos datos: ¿debería un diseñador colaborar con la industria de la comida "basura" sin alertar de su riesgo? ¿debería colaborar realizando trabajos sin advertir su consumo?
Existen países que ya regulan su publicidad a través de imágenes y comerciales, pero ¿debería ser una ley común como ocurre con el tabaco? Claro está que la obesidad se genera con el consumo descontrolado de productos de la industria azucarera y de aceites, y poco estamos haciendo para controlarlo. ¿Hasta cuando?...

Créditos: La imagen selecciona tiene una Licencia CC0 1.0 Universal (CC0 1.0) Dedicación de Dominio Público. Más información sobre su autor haciendo click AQUÍ.

Dando continuidad a nuestro estudio sobre la relación del diseño con el consumo de la comida basura, cabe destacar la imagen feliz que publicamos en este caso.

Créditos de la imagen: https://www.freepik.es/

Los colores y las expresiones inducen al consumo de un determinado producto según estudios publicados por Obesity Reviews, principalmente en los niños.

Crédito de la imagen: https://www.freepik.es/

Me gustaría compartir con vosotros este foro que trata de diversos temas sobre el diseño y en especial este post que he encontrado que nos lleva a una reflexión sobre el poder del diseñador en la sociedad. Prestad mucha atención en el párrafo sobre "decir la verdad", es interesante la relación directa que hace con la publicidad y la ética del diseñador dentro del área. Una de las frases que me han impactado, entre otras, es está:

los años de Stalin en Rusia, todo lo que llevaba la etiqueta de «ternera» en realidad era pollo. No me quiero imaginar qué sería lo que llevaba la etiqueta «pollo». Podemos aceptar algún nivel mínimo de engaño, como que nos mientan a cerca del tenor graso de sus hamburguesas, pero cuando el carnicero nos vende carne podrida nos vamos a otra parte. Como diseñadores ¿tenemos menos responsabilidad con nuestro público que un carnicero?

Aquí os dejo está reflexión.

¿Cómo conseguir que la gente pague por un puñado de ingredientes perjudiciales para la salud? ¿Cómo hacer atractivo un producto que, básicamente, es una autentica basura? En realidad, mucho antes de que llegues a leer la lista de ingredientes y sepas interpretar las consecuencias de su consumo, ya te han convencido de la compra.

Es la conclusión del nutricionista Carlos Ríos en su libro "Come comida Real" - Una guía para transformar tu aliento y tu salud. El contenido se puede leer en la página 100 "La primera P: el producto", cuando se refiere al impacto del MKT en el consumo de la comida basura.