Alumnos, padres y profesor están conectados. Es un sistema de retroalimentación en el que el profesor puede poner positivos y negativos tanto a alumnos de forma individual a grupos de clase o a la clase entera. Esta retroalimentación aparece de forma automática a las familias, las cuales saben cómo es su hijo en clase a lo largo del día (si es ordenado, si levanta la mano antes de hablar, si llega puntual, si es respetuoso o no, etc) además permite subir fotos y crear un diálogo con las familias.